MOTRICIDAD FINA
La motricidad fina es la relación entre los músculos pequeños, generalmente de las manos y dedos, con los ojos. Un buen desarrollo de la misma se logra con la estimulación de los músculos de las manos y dedos para que estos sean cada vez más precisos, logrando así una mayor destreza manual y coordinación visomotora , lo que se refleja positivamente en sus actividades cotidianas.
El nivel de control de la motricidad fina en los niños se utiliza para determinar su edad de desarrollo. Los niños desarrollan destrezas de motricidad fina con el tiempo, al practicar y al enseñarles. Para tener control de la motricidad fina, los niños necesitan:
- conocimiento y planeación
- coordinación
- fuerza muscular
- sensibilidad normal
- Recortar formas con tijeras
- Dibujar líneas o círculos
- Doblar ropa
- Sostener y escribir con un lápiz
- Apilar bloques
- Cerrar una cremallera
Las siguientes tareas pueden ocurrir sólo si el sistema nervioso se desarrolla de la forma correcta:



ARRUGADO
Esta técnica es esencial para los niños porque permite abrir la mano y poder empezar con las demás actividades. Desarrolla la coordinación motora fina, por ello es un elemento necesario en la pre-escritura inicial. También permite básicamente desarrollar la coordinación viso-motora fina, percepción táctil y destreza manual. Antes de arrugarse el papel debe realizarse ejercicios de expresión corporal y luego se realiza el trabajo con una mano y luego con las dos manos, por último con el pulgar y el índice, haciendo la pinza digital, esto es cuando se trabaja con papeles pequeños.


RASGADO
¿En qué consiste la técnica del rasgado?
Consiste en crear una imagen con papel rasgado a mano. Los trozos no deben tener una forma específica, pueden ser formas libres y, se les puede indicar que el rasgado sea de una forma geométrica determinada.
para este ejercicios podemos utilizar cualquier tipo de papel, ya sea, servilletas blancas o de colores, papel periódico, revistas entre otros. una vez tengamos el dibujo.
- Con esta actividad los niños tendrán un acercamiento a las formas geométricas que pueden existir, además de tener un acercamiento a uno los materiales que posteriormente utilizará en otros trabajos.
- Se preparan para aprender a escribir.
- Ejercitan sus dedos y manos realizando movimientos que promueven un agarre adecuado y desarrollan la pinza de manera cada vez más funcional
- Realizan movimientos precisos que favorecen la destreza manual.




PICADO
Es una actividad que estimula el desarrollo de la habilidad ocular- manual, ya que le exigen al niño coordinación y delicadeza de movimientos para perforar el papel. Les proporciona seguridad, control de emociones, firmeza y atención en el niño. La utilización frecuente y progresiva de esta técnica facilitará el manejo del lápiz y dará mayor seguridad al niño cuando vaya a escribir o hacer trazos específicos. Por ello, tiene un gran valor aprender a tomar el punzón de manera adecuada, ya que requiere de atención y coordinación manual del niño para que los puntos perforados no queden dispersos entre sí, sino que guarden una distancia semejante y se conserve la figura seleccionada.
Por lo tanto, el picado constituye un ejercicio fundamental de entrenamientos psicomotor; no sólo inhibe los movimientos manuales que se deben restringir, sino que también actúa sobre la estabilidad de la atención y de la conducta.


RECORTADO
Aprender a recortar puede parecer algo sencillo, una tarea sin más importancia que el simple hecho de recortar. Pero recortar es una tarea mucho más complicada de lo que podemos pensar en un primer momento. Para aprender a recortar correctamente es esencial que el niño:
- Logre una coordinación óculo-manual, que le permita seguir la línea que ha de recortar, aquella línea que ve con el ojo y que debe seguir cuando hace una acción la mano.
- Consiga unas destrezas psicomotoras que le permitan recortar con precisión, coger las tijeras con fuerza y seguir las líneas marcadas para hacer los cortes.
- ¿Cuándo puede un niño aprender a recortar? Es importante introducir este aprendizaje cuando el niño esté preparado, cuando tenga suficiente fuerza o destreza en las manos como para poder usar las tijeras. Esto sucede en torno a los 3-4 años de edad. En un primer momento no recortara con destreza, pero puede comenzar a aprender a recortar.
- ¿Cómo sabemos si el niño está preparado para aprender a recortar? Para saber si el niño está preparado para aprender a recortar podemos prestar atención a algunas indicaciones:
- Sabe utilizar ambas manos para realizar tareas sencillas, como por ejemplo abrir un tarro.
- Sabe utilizar los cubiertos (Tenedor o cuchara)
- Es capaz de separar los dedos.
- ¿Qué tipo de tijeras? Para comenzar a recortar es muy importante emplear unas tijeras adecuadas. Se recomienda emplear tijeras de plástico y sin filo, que no supongan un peligro para el niño.
- ¿Cómo es el proceso de aprender a recortar? Es un proceso largo que lleva su tiempo y en el que tenemos que respetar los ritmos de cada niño. En un primer momento el niño cojera las tijeras con rigidez y sus cortes serán torpes. Por eso comenzaremos con pequeños cortes, hasta ir consiguiendo más precisión. Más adelante podrá recortar líneas, habrá ganado destreza con las tijeras y los músculos de la mano serán más fuertes. El siguiente paso es comenzar a recortar líneas torcidas, después formas simples (círculo, cuadrado, etc.) y finalmente formas complejas.
- ¿Cómo coger las tijeras? Es importante enseñar al niño como coger las tijeras, el dedo pulgar dentro de uno de los ojos, el dedo índice encima de guía, y el dedo corazón y anular en el otro ojo de la tijera.
- Actividades para aprender a recortar. Las actividades recomendadas se basan en el proceso de aprender a recortar, actividades con líneas marcadas con puntos, con formas y figuras.
- Recortar contribuye al desarrollo de la motricidad fina.
- Cuando un niño aprende a recortar adquiere dominio y destrezas manuales.
- Es muy importante el desarrollo de estas destrezas para la adquisición de la escritura.
- Los músculos de la mano se desarrollan y permiten elaborar con precisión lo que la mente requiere.
Por lo tanto recortar es más complejo de lo que podemos imaginar en un primer momento y además requiere la participación de diferentes procesos mentales. Es muy importante que un niño aprenda a recortar, no solo por el mero hecho de recortar, la importancia radica en lograr la estimulación para el desarrollo de la motricidad fina.
Para enseñar a un niño a recortar tenemos que tener en cuenta algunas pautas que contribuyen al adecuado desarrollo de esta labor.
Cuando el niño sea capaz de hacer estar cosas podemos comenzar a recortar.
Aprender a recortar tiene muchos beneficios para el niño.

